«Mi abuela y mi hermana me han enseñado a respetar y amar les Fogueres»

Para Marta Ponce, su llegada al mundo de Les Fogueres fue «una bonita casualidad» y es que hace 19 años que ella y su familia entraron a formar parte de la foguera Oscar Esplá. La Dama de Honor de la bellesa del foc d´Alacant nació en Alicante hace 22 años y estudiaba allá por junio el 5º curso del grado de Relaciones Públicas en la Universidad de Alicante.

Sus hobbies son el cine, viajar y sobre todo el deporte; desde bien pequeña ha practicado equitación, tenis, natación y ballet, pero en estos momentos el fitness se ha convertido en su actividad física de cabecera.

Su abuela María del Carmen y su hermana Laura son sus dos grandes referentes festeros, ya que ellas han sido quienes le han enseñado el amor y el respeto por Les Fogueres de Sant Joan.

Marta se siete muy afortunada por haber podido vivir el 90 aniversario de la Fiesta desde primer plano y asegura que fue para ella «una celebración inolvidable».

 

Cuenta con un largo recorrido dentro de las fiestas del fuego en nuestra ciudad ya que, desde los 3 años forma parte de su comisión, la Hoguera Óscar Esplá. Toda una vida dedicada a su pasión, Les Fogueres, formando parte activa de ella y no solo ostentando cargos honoríficos, que también, sino que Marta ha preferido involucrarse desde dentro, llevando a su cargo diversas delegaciones.

Han sido miles las anécdotas que durante toda su vida le han proporcionado las fiestas de Fogueres, una de las más divertidas o por lo menos, la que guarda con más cariño, es la siguiente: «me acuerdo de unas Hogueras, con cinco añitos, en que me corté el flequillo yo sola con las tijeras de las manualidades del colegio justo el día antes de desfilar en la Entrada de Bandas. Me lo corté tan a ras, que se me quedaba todo el pelo de punta y mi madre no podía pegármelo con ninguna gomina. Desfilé con una cresta mohicana. Todavía oigo los gritos de mi madre….No se me olvidará jamás».

Marta proviene de una familia festera, padres y hermana se encuentran integrados en su comisión de toda la vida. El sentimiento del fuego les vino de la mano de su yaya María del Carmen Peiró, Dama de Honor de la Bellea del Foc 1961. Gracias a esa mujer, todos aprendieron a amar profundamente a nuestra ciudad, su fiesta y sus tradiciones.

Y es que Marta siente que “nunca tendría vida para devolver a la Fiesta todo cuando me aporta” y exclama espontánea “¿cómo elegir una sola cosa de nuestras Hogueras? Si desde que llega Junio me alboroto toda deseando oler la pólvora, comer coca amb tonyina y lucir mis mejores galas de alicantina… ” y es que para Marta las Hogueras no son una sucesión de eventos, sino un sentimiento que se lleva en la sangre, como la familia, y como tal, las amas enteras, incondicionalmente, con sus defectos y virtudes.

 

Marta Ponce con su familia (fotografía cedida por la familia Ponce Rodríguez)

 

 

 

 

 

 

A lo largo de los siguientes días revisitaremos las entrevistas que realizamos a las mujeres de fuego para nuestro número de junio de 2018 y la web de El Foguerer. Esperamos que os guste. Los textos fueron realizados por Paloma Núñez y Violeta Trives y las fotografías por José Simarro.