Pere Baenas es el flamante ganador en la secció especial de las Fallas de Valencia 2018, horas antes de serle otorgado el máximo galardón fallero tuvimos la oportunidad de entrevistarle, a pie de Falla, entre pinceles y paletas de colores. El ritmo frenético se palpaba en el ambiente, pero también reinaba un gran optimismo, por estar viviendo una plantà ordenada, y desbordante de alegría.
Convento Jerusalen- Matemátic Marzal, es una demarcación difícil, que implica una responsabilidad añadida, no en vano, es uno de los lugares más visitados durante estos días grandes de fiesta fallera. Pere Baenas, un artista experto en la categoría, sentía la responsabilidad al tener entre sus manos el presupuesto más elevado del presente año.
La idea de esta Falla surgió de un germen inicial que ha ido poco a poco desarrollándose , nos habla satisfecho y convencido de que esta es, sin lugar a dudas, su mejor falla, el mejor de sus proyectos, en el que destaca la composición, pintura, estilo y volumen.
Ha cumplido un sueño y su objetivo inicial, que era volver a tocar el cielo logrando el primer premio de la categoría especial 2018, aunque nos reconoce que su mayor premio, le fue otorgado hace 10 dias, cuando la falla de Convento, le renovó para la realización de la Falla 2019 en esa misma demarcación. Y es que Pere nos reconoce orgulloso, que la confianza depositada en él antes de los premios, no solo le aporta tranquilidad para afrontar una plantà tranquila, sino que le llena de satisfacción.
Una falla de 21 metros se erige majestuosa, habiendo siendo rival de otras tantas militantes de la misma secció, para las que Pere tiene palabras de cariño, y es que esta sana competencia, para el, supone algo enriquecedor ya que valora de forma positiva la evolución de estilos, y el dinamismo que reina en la actualidad en dichas obras.
Este artista valenciano ha tenido un amplio reconocimiento en nuestra ciudad, Alicante, en los ya más de 15 años que lleva plantando en la Foguera Carolinas Altas. Se siente reconocido, querido, e incluso mimado por el público alicantino, que le dio la oportunidad de arriesgar artisticamente, probar formas y texturas nuevas, y obtener el beneplácito de la inmensa mayoría, es algo que recordará siempre.
Tan solo quedan tres meses para poder contemplar una nueva obra suya en nuestra ciudad, verlo de nuevo trabajando de forma incansable , a pie de Foguera, atendiendo a medios, comisionados y visitantes, mientras le da color, pistola en mano, a algún trocito de su obra. Mientras tanto, disfrutaremos de esta maravillosa Falla, que quedará en los anales de la Historia de la fiesta fallera y sobre todo, en la de la comisión Convento-Jerusalen.
¡Enhorabuena Maestro !
