Artículo de Juan Carlos Vizcaíno

El 13 de mayo de 1981, en el marco del Teatro Principal de Alicante, tenía lugar el primer acto de Proclamación de la Bellesa del Foc d’Alacant, cargo que aquel año recaería en la Srta. Pilar Valencia Ganga, representante de la foguera Bº José Antonio. Todo ello, en el único año de la historia de nuestras fiestas, en que se eligieron ocho Damas de Honor, contando en aquella ocasión inicial como mantenedor, con el escritor alicantino Vicente Mojica. Dentro de un periodo de cambios y modernización del conjunto de nuestras celebraciones, la implantación de esta iniciativa, unida al de su equivalente infantil, permitió dignificar de manera definitiva, la investidura oficial de unas representantes que hasta ese año, vivían la imposición de sus bandas en los mismos instantes en que eran elegidas, con su propio traje como belleza de distrito, asumiendo unas bandas elaboradas con medidas standard, viviéndose en ocasiones situaciones tensas, cuando el mundo de les Fogueres protestaba por las representantes elegidas en algunas de las ocasiones.

Llegada de la Bellesa del Foc al acto de la proclamación 1993

No eran los modos más adecuados, y por ello, y atendiendo sobre todo otros ejemplos contundentes ya consolidados en la Comunidad Valenciana, la Comissió Gestora que presidía Jacinto Masanet, implantó una ceremonia en las que nuestras representantes eran investidas con toda solemnidad, estrenando los trajes de novia alicantina expresamente confeccionados para ellas.  No deja de ser verdad, que tuvieron que transcurrir bastantes años, para que este acto albergara el suficiente interés, ya que el mismo centraba el atractivo únicamente para las delegaciones festeras presentes, al tiempo que para las comisiones cuyas representantes eran proclamadas. En cierto modo era comprensible, ya que en Alicante la tradición y la pasión siempre se ha visto marcada en el carismático acto de elección –de características posteriormente imitadas en otras ciudades-, que siempre oscurecerá en cierta medida el sentido de una cita que, justo es reconocerlo, con el paso del tiempo ha adquirido una creciente significación, como preludio de nuestras fiestas.

 

Será este sábado y domingo, cuando las últimas treinta y siete máximas representantes de les Fogueres, hayan vivido la importancia de esta cita institucional, que durante muchos años se ha celebrado en el ya mencionado Teatro Principal, pero que a lo largo del tiempo ha albergado otros ámbitos de celebración, como podría ser la Plaza del Ayuntamiento, el Paraninfo de la Universidad, el Parque Lo Morant, y que este año estrena un marco, para el que parecía predestinado desde la propia creación del mismo; el auditorium del ADDA.

 

Llegada de la Bellesa del Foc a la Proclamación de 1994

Será una novedosa experiencia, para una convocatoria que destacó en sus primeros años, por el alcance de algunos de sus mantenedores. Recordemos que entre ellos se encontraron verdaderas primeras figuras de la escena española, como los actores José María Rodero (1986), Paco Valladares (1985), Emilio Gutiérrez Caba (1987) o el humorista José Luís Coll (1984). La oportuna mediación del entonces gerente del coliseo alicantino, Luís de Castro –también mantenedor una ocasión-, permitió que ese aporte de prestigio enriqueciera la pequeña historia de este acto. Una convocatoria que por vez primera se realizó en la Plaza del Ayuntamiento en 1986, cita que las crónicas calificaron de fría, en cierto modo por la cercanía de una lluvia, y que dos años después vivía la suspensión de su fecha original también por dicha lluvia, cuando se elegía por vez primera –y única- el marco del Parque Lo Morant, incorporándose dicho año dos novedades. La primera; la imposición a las homenajeadas de una insignia especial a ellas destinada, y la segunda, la celebración de la fiesta anual de la proclamación. En 1990, debido a las obras que vivió el Teatro Principal, la proclamación de Nuria Larrosa tuvo que celebrarse en el Paraninfo de la Universidad, siendo esa la primera ocasión que el mismo era retransmitido por la recién creada Canal Nou-RTVV a toda la Comunidad Valenciana. Sería, por supuesto, un punto de inflexión cara a la difusión del mismo, en unas fiestas como las nuestras, que fueron alcanzando una definitiva consolidación regional, a partir del aporte del desaparecido canal autonómico.

 

Aspecto del Teatro Principal en la Proclamación de 1994

Y a partir de esos momentos, el posterior desarrollo de la cita anual de la proclamación, se caracterizará por la aportación como mantenedores de conocidas figuras del mundo de la fiesta. Recordemos como José Ángel Guirao, que había dirigido en calidad de delegado artístico de la Comissió gestora varios de dichos actos, ejerció como mantenedor en 1993, de la representante de aquel año, Sonia Molina.- O como Andrés Lloréns haya sido hasta el momento, el único foguerer que ha actuado como mantenedor en dos ocasiones -1995 y 2008-. Desde el año de su creación, los alcaldes que han impuesto la banda a nuestra máxima representante femenina, han sido José Luis Lassaletta, Ángel Luna, Luís Díaz Alperi, Sonia Castedo, Miguel Valor y Gabriel Echávarri.

 

Lo cierto es que a lo largo de una andadura que se aproxima a la mitad de la historia de nuestras fiestas, resulta casi impensable entender su preludio sin el aporte, la distinción y la oficialidad que proporciona, ese homenaje de ámbito regional, que el conjunto de las fiestas valencianas, rinden a la figura de nuestra Bellesa del Foc d’Alacant i les seues Dasmes d’Honor y que este fin de semana capitalizarán el preludio de les Fogueres 2017.