Aida Galán Gálvez es una mujer de 22 años, festera hasta la medula, estudiante de tercer curso de Medicina Veterinaria por la Universidad UCH-CEU de Valencia y es la actual candidata de la Foguera Santa Isabel 2018. Una Foguera en la que recaló después de vivir su infancia en la Foguera Virgen del Remedio – la Cruz, y en la que ha ostentado todos los cargos honorificos.

Considera que este ejercicio es mágico y especial, cada momento ha resultado muy significativo y emotivo. Cree que se han superado todas sus expectativas y ni en el mejor de sus sueños hubiera imaginado disfrutar de esos intensos segundos de la Ofrenda de Flores, cuando su padre se vistió por primera vez para llevarle de su brazo.

Su futuro lo ve al lado de sus “isabelinos”, como bien le gusta llamar a los miembros de su comisión, una segunda familia incansable, fuerte y perseverante, que logran los objetivos que se van marcando sin renunciar a las sonrisas y a la diversión.

Cree que su puesto ideal sería en la Delegación de Bellezas, puesto que ahora ha adquirido una experiencia en el cargo que piensa puede ayudar a las venideras. Aida aún no puede creer que el 2017 haya sido tan perfecto, ya que hasta su prima resultó elegida Belleza infantil, pudiendo compartir junto a ella, ese intenso ejercicio. Y es que para una mujer como Aida, en la que la familia es el centro de su vida, haber tenido esa fortuna lo guarda en su corazón como el más preciado de sus tesoros.

A Aida una de las cosas que más le gustan de la fiesta es el sentimiento de unión entre todos los festeros:  «puede que no nos conozcamos todos a fondo, pero cuando coincides con alguien de la fiesta siempre hay algún tema del que hablar, si algo ocurre en una comisión nos sentimos identificados y ofrecemos nuestra ayuda. Pero sobre todo nuestro amor por nuestra ciudad».

Vestida en indumentaria regional por “Ninots”, ha elegido para la Pasarela del Puerto a Jose y Toni Alta costura. Estos días de convivencia con las candidatas están resultando apasionantes, se siente impaciente por la llegada de las convivencias en Lyon, aunque también asume cierto halo de melancolía, ya que pronto llegará el final y solo siete serán las afortunadas.

Aida, una mujer optimista y festera.

¡Suerte!