Carmen nació el 7 de diciembre de 1996 en el Hospital General Universitario de Alicante, justo en el distrito donde planta su comisión: “No sé si fue el destino o, simplemente, una mera casualidad, pero el lugar que me vio nacer es el que me ha permitido crecer y vivir como festera pero, sobre todo, el que me ha dado la oportunidad de representarle durante el pasado ejercicio fogueril como su Bellesa”.

Entró a formar parte de su  comisión, la Foguera Altozano Sur, hace 17 años, de la mano de sus tíos, quienes le convirtieron desde bien pequeña en una enamorada del fuego y de la pólvora. Conforme pasaron los años disfrutando en la Comisión, todo vino rodado: en 2007 fue Dama Infantil, en 2015 Dama Adulta y el pasado año, en 2019, tuvo el enorme placer de representar a su distrito como Bellesa. Es graduada en Óptica y Optometría por la Universidad de Alicante y en la actualidad, desarrolla su actividad profesional en una clínica de terapia visual.

Tras todo lo vivido en tanto tiempo como festera, uno de los mejores momentos que ha vivido Carmen fue su presentación como Bellesa de su Foguera: “fue un día muy especial y emotivo que siempre recordaré con mucho cariño, gracias al amor que me mostraron mi comisión, así como por mi familia y amigos. Sin embargo, no puedo dejar sin mencionar el momento tan emotivo que viví en la cremà, fuego y pólvora unidos en una misma noche que pude sentir y disfrutar con mis Damas y con mi Bellesa Infantil”.

En cuanto al futuro, espera seguir trabajando por y para les Fogueres de Sant Joan desde su comisión, un distrito humilde y trabajador que vive por y para la fiesta: «para ello, ya estamos con las pilas cargadas en todos los actos que organizamos y participamos, como los playbacks y los villancicos que celebramos en diciembre, los almuerzos populares, las paellas en el Parque Lo Morant… ¡y en todo lo que haga falta para continuar con la fiesta y con las tradiciones!”

Otro de los momentos que nunca olvidará Carmen es la Nit de la Cremà: “cuando antes de quemar nuestros monumentos, todos los comisionados bailamos alrededor de ellos y animamos a la gente de fuera que espera con ilusión la banyà. Es un momento divertido, ya que tenemos la suerte de que nos acompañan muchas personas esa noche. Los cargos vestidos con la indumentaria alicantina, los comisionados con la camiseta de la hoguera, bomberos y nuestra banda de música animamos desde el interior de la valla para que disfruten al igual que nosotros de un momento tan especial como es esa noche”.

Las mascletás, los desfiles y pasacalles, la música festera, los almuerzos de cada comisión o la Nit de la Cremà, entre otras muchas cosas, son varios de los elementos que más le gustan y con los que más disfruta: “si tuviera que decantarme por alguno sería la Ofrenda de Flores a la Virgen del Remedio, patrona de nuestra ciudad. Ver la Concatedral de San Nicolás decorada por todos los ramos de flores ofrecidos por todos los alicantinos es un momento mágico”.

Una de las cosas que le gusta menos es que “las fiestas duran menos días de los que me gustarían. Trabajas con muchísima ilusión durante todo un año y los días más especiales, desde la plantà hasta la cremà, cuando llegan pasan tan rápido que la semana de Fogueres se convierte en efímera. Por eso, trato de exprimir cada día de junio al máximo para disfrutar, año tras año, de las fiestas”.

También le gustaría que los monumentos contasen con una mayor accesibilidad para, por ejemplo, personas con problemas de visión que no pueden contemplar su arte: “me encantaría que se modelasen ninots y partes específicas de cada monumento que pudieran tocarse para que estas personas puedan sentir el tacto del cartón, la pintura y la madera y completar de esta manera su experiencia en la Fiesta. Sin embargo, el año pasado me pareció fantástico que algunas comisiones implementaran el lenguaje braille en los carteles explicativos de sus momentos para ayudar a estas personas a comprender el simbolismo y significado de los monumentos”.

Si fuera una de las elegidas en el festival de la elección en mayo, “me alegraría de todo corazón por todas las personas que me han acompañado durante este año tan mágico y maravilloso. Muy especialmente, por mi familia y mi Comisión, que me han ayudado a recorrer este bonito camino durante toda una vida en la Fiesta”. En la elección de la indumentaria, ha decidido confiar su traje de alicantina a unas manos expertas, como son las de Conchi Beneyto, “quien es capaz de hacerme vestir y sentir como una auténtica novia alicantina. Para el traje de la Gala del Puerto, me decanté por la Alta Costura de Balbino, capaz de dar forma a mis ideas y transformar, con aguja e hilo, una tela en una auténtica obra de arte. Ambos son dos grandes profesionales de la indumentaria alicantina y estoy y estaré eternamente agradecida por su pasión y trabajo”.

Durante su año de candidata, espera disfrutar al máximo de todas las actividades en las que participará junto a sus compañeras, “a las que espero conocer y forjar una bonita amistad. Estoy totalmente segura de que los próximos meses van a ser una aventura fascinante, que espero exprimir gota a gota para disfrutar de una inolvidable etapa”.