Alicantina de 25 años, Alba Martinez llega hasta nosotros con una gran sonrisa y porte elegante, así es la actual candidata de la Foguera Passeig de Gomiz. Una comisión que se encuentra en pleno aniversario fundacional ya que son 25 años los que llevan aportando la luz de les fogueres a este rincón emblemático de la ciudad de Alicante.

El curriculum de Alba es amplio tanto a nivel honorífico, habiendo ostentado el cargo de Dama de Honor hasta en tres ocasiones, como en el funcional, llevando adelante la delegación artística, algo que adora por la analogía con su trabajo, no en vano, en la actualidad dirige su propia escuela de danza clásica tras haber sido bailarina profesional, trasladándose a Madrid para compatibilizar con su carrera de pedagogía.

 

 

Alba es una mujer cercana que adora la sensación de unión de los pasacalles en «familia», palabra que bien describe a su comisión de hoguera. Esa a la que espera pertenecer toda la vida intentando sumar a los que vengan en el futuro. «Ojalá pueda ofrendar muchísimos años a su lado», comenta orgullosa.

Tiene cientos de anécdotas divertidas en su devenir festero, especialmente del año como Belleza 2018, recuerda con un cariño especial la siguiente: «en un pasacalles se me ocurrió pedirle los platillos a nuestra colla, me divertí tanto que acabé tocando todos los instrumentos, por supuesto con agujetas en los brazos al siguiente día…”.

Ya queda muy poco para que llegue el gran día de la elección y Alba sueña con que su nombre suene en la apertura de sobres final. Se alegraría por todas y cada una de las personas que le han acompañado en este camino, especialmente por su pequeño hermano de 14 años, al que con nostalgia recuerda cuando le regaló su primer chaleco el cual le cabía en la palma de la mano.

Y es que el tiempo transcurre de forma incesante, y todos debemos ir adaptándonos a las distintas épocas, fomentando la integración y esos momentos tan especiales en los que prima el compañerismo y el respeto, esos que te hacen ser mejor persona.

Ataviada por el experto indumentarista alicantino Miguel Ramos, opta por Ruben Hernández para el vestido de la Gala del puerto. Disfruta esta experiencia junto a todas sus compañeras candidatas de todos y cada uno de los actos que han preparado especialmente para ellas.

Y tras la elección si no resulta elegida, Alba lo tiene claro, volverá a su casa, a su Passeig, a ayudar a llenar las calles de alegría con la fiesta frente al mar, y a esperar ansiosa de nuevo su momento favorito, la cremà, ese instante purificador a través del monumento, que hace sentir pena y alegría a partes iguales, ese homenaje al fuego que pese a convertirse en ceniza, da paso a un nuevo ciclo.

Alba, sensibilidad pura.

¡Suerte!